Son obras iniciaticas, es decir, tú tienes que practicar con ellas, no es suficiente con el mensaje lógico y racional, son obras que te llevan a practicar. En el caso de la tabla de esmeralda, la practica es la alquimia, habla de los 4 elementos y como utilizarlos, lo que es arriba es abajo, como utilizar esos 4 elementos con la naturaleza, para según tu voluntad, transformar y convertir las cosas como quieras, en la piedra filosofal. El Kybalion, lo que hace es un ejercicio iniciatico de magia, es un libro filosófico cuyos principios se practican en magia, enseña el conocimiento de las energías celestes y terrestres, las energías que mueven el mundo, las energías que se utilizaron en la creación y que no volvieron a ser utilizadas. Los egipcios desarrollaron tecnicas que aun se utilizan por chamanes africanos, para dominar los elementos naturales ó para influir mentalmente sobre las personas. Esa magia se divide en dos grandes apartados, la magia natural, la cual se basa en utilizar tecnicas con la naturaleza, y la alta magia, que utiliza tecnicas con entidades divinas, hay miles de tecnicas recogidas en libros y papiros egipcios.
Toda gran tradición religiosa mundial, ya sea el judaismo, el hinduismo, el budismo, el islamismo tienen la enseñanza para todos, enseñanza esotérica, que se supone siguen todos sus fieles, y también una enseñanza mistica, la única que no la tiene es el cristianismo occidental, pues ha sido considerado por dicha iglesia como un camino herético, camino que muchas personas buscamos y recorremos para nuestro desarrollo. El hermetismo fue silenciado en la edad media por la iglesia, mediante torturas a sus seguidores, pasando a ser algo prohibido. Aún así y curiosamente, hay iglesias que poseen simbolos paganos, en el mismo vaticano, en la plaza que lo rodea se puede observar un obelisco claramente egipcio, una piña gigante, en clara alusión a la glandula pineal. Hoy día, afortunadamente, somos cada vez más las personas que estamos desentrañando todos estos conocimientos ancestrales y que dificilmente nos podrán volver a arrebatar.
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